10º aniversario de la carne cultivada: una década de innovación sostenible en la industria alimentaria - Proveedores de Hostelería en HosteleriaenValencia.com
10º aniversario de la carne cultivada: una década de innovación sostenible en la industria alimentaria
Más de 150 empresas en todo el mundo trabajan en carne y mariscos cultivados, aproximadamente 50 de ellas están en Europa
El 5 de agosto, la comunidad científica y la industria alimentaria en todo el mundo celebran el décimo aniversario del hito histórico que cambió el paradigma de la producción de alimentos: la presentación de la primera hamburguesa de carne cultivada por el científico holandés Dr. Mark Post en un evento en Londres este mismo día de 2013. Desde aquel momento pionero, la carne cultivada ha experimentado una increíble evolución y se ha convertido en una realidad tangible de la industria alimentaria.
A lo largo de esta última década, la carne cultivada ha dejado de ser un concepto futurista para convertirse en una prometedora solución a los desafíos de sostenibilidad y seguridad alimentaria que enfrenta el mundo. Y, estos avances científicos y tecnológicos han sido fundamentales para llevar esta innovación a la mesa de los consumidores.
En el décimo aniversario de este logro histórico, The Good Food Institute Europe, la ONG que promueva el avance de las proteínas sostenibles, incluida la carne cultivada, pone en valor algunos de los momentos más significativos, así como los avances notables que se ha visto en el campo de la carne cultivada durante estos diez años:
● España a la vanguardia de la revolución alimentaria: BioTech Foods, una empresa española, ha iniciado la construcción de su fábrica de carne cultivada en San Sebastián después de recibir una financiación de 5,2 millones de euros del proyecto CULTUREDMEAT, apoyado por la Unión Europea y con una contribución adicional de 3,7 millones de euros del Ministerio de Ciencia español. Además, AgriCultura Celular España ha lanzado sus operaciones como una organización sin ánimo de lucro que cataliza el ecosistema español de la carne cultivada. Estos avances indican que España progresa en la industria de la carne cultivada y se convierte en un eslabón clave del crecimiento global de esta tecnología sostenible.
● Una realidad ya disponible en el mundo: en países como Singapur, muchos consumidores ya tienen la oportunidad de disfrutar de pinchos de pollo cultivado a un precio asequible (aproximadamente €12,74), demostrando que la carne cultivada es una opción cada vez más accesible y tangible para el gran público. Esta tendencia hacia la accesibilidad también se ha visto reflejada en el hecho de que, aunque en sus inicios la producción de carne cultivada, como la hamburguesa original de Mark Post, costaba aproximadamente 250.000 euros, los avances tecnológicos han permitido reducir significativamente los costos, allanando el camino para una mayor adopción y disponibilidad de este innovador producto en el mercado global.
● Innovación continua: empresas pioneras como Meatable han alcanzado logros sorprendentes en la producción de carne cultivada, reduciendo drásticamente el tiempo y los recursos necesarios para su elaboración, logrando producir en tan solo 8 días lo que en el pasado llevaba 2 años. Estos avances están allanando el camino hacia una mayor eficiencia y sostenibilidad en la industria de alimentos.
● Aprobaciones regulatorias: la carne cultivada ha recibido la aprobación de autoridades reguladoras en los Estados Unidos y Singapur. Además, Aleph Farms, una empresa israelí, presentaba hace una semana una solicitud a los reguladores suizos para vender carne cultivada, marcando un hito en la industria en Europa. Esto refleja el creciente reconocimiento de esta tecnología como una alternativa viable a la carne convencional.
● Expansión global: más de 150 empresas y científicos de todo el mundo, con aproximadamente 50 de ellas ubicadas en Europa, se han unido para impulsar la investigación y el desarrollo de la carne cultivada. La colaboración internacional ha llevado a una rápida expansión de esta tecnología en diversos países y regiones. En este sentido, los Países Bajos anunció una cifra récord de 60 millones de euros el año pasado y el Reino Unido comunicó un centro de investigación de 12 millones de libras en abril. A su vez, las compañías europeas de carne cultivada vieron aumentar sus inversiones privadas en un 30% el año pasado, lo que corresponde a 120 millones de euros.
● Beneficios ambientales: estudios científicos han confirmado que la carne cultivada producida con energía renovable podría reducir las emisiones climáticas hasta en un 92%, disminuir la contaminación del aire hasta en un 94% y utilizar hasta un 90% menos de tierra en comparación con la carne convencional.
En este contexto, Alex Mayers, director gerente de The Good Food Institute Europe, señala que "si nos fijamos, la carne cultivada es una innovación muy europea, cuyas bases fueron establecidas por científicos franceses y holandeses. El progreso realizado en la última década es notable, pero todavía queda mucho camino por recorrer para hacer que esta opción sostenible esté disponible para todos. Con otras partes del mundo avanzando rápidamente, la UE y los gobiernos nacionales deben invertir en carne cultivada para asegurar que sus beneficios también se sientan aquí en Europa".
Por su parte, Richard McGeown, el chef que cocinó la primera hamburguesa de carne cultivada en 2013, expresó que "es increíble pensar que en el corto espacio de una década, la carne cultivada ha pasado de ser un pequeño prototipo en el que trabajé, a convertirse en una industria global y un alimento que la gente puede disfrutar en dos continentes, reconocido y respaldado por chefs de renombre como José Andrés y Dominique Crenn".
Con una visión hacia el futuro, la carne cultivada promete seguir evolucionando y expandiéndose en la próxima década. Los científicos e investigadores continúan explorando nuevas posibilidades para hacer que esta opción sostenible sea aún más accesible para todos.
Acerca de Good Food Institute: El Good Food Institute Europe (GFI) es una organización no gubernamental de carácter internacional que ayuda a construir un sistema alimentario más sostenible, seguro y justo mediante la transformación de la producción de carne.
GFI trabaja con científicos, empresas y responsables políticos para promover la carne cultivaday de origen vegetal, ofreciendo un producto sabroso, asequible y accesible en toda Europa.
Inspirada por la filantropía, GFI emplea sus esfuerzos en reducir el impacto medioambiental de nuestro sistema alimentario, disminuir el riesgo de resistencia a los antibióticos y facilitar el acceso a alimentos de alta calidad utilizando menos recursos.