Si se inhala, como hemos comentado, hace más fluida la flema facilitando su eliminación (expectorante). Por tanto, se utiliza en casos de resfriados, sinusitis, gripe, tos, laringitis, bronquitis aguda y crónica, síndromes gripales, asma.

Él aroma fresco y balsámico ayuda a purificar el aire de las habitaciones de la casa.

    El aceite esencial de pino silvestre, además de ser un buen diurético, actúa como antiinflamatorio del tracto urogenital, resultando eficaz en casos de prostatitis, uretritis, cistitis y leucorrea. El uso externo o interno de este aceite esencial, gracias a su acción diurética, ayuda en la gota y el reumatismo.

    Desde la antigüedad, se ha utilizado el pino para preparar abluciones (baños), beneficiosas y fragantes. De hecho, tiene propiedades calmantes. Una de las soluciones más sencillas y que puedes preparar cómodamente en casa es un agradable baño relajante con unas gotas de aceite esencial de pino. Esta esencia no solo regenera la piel sino que es es un excelente bálsamo para las vías respiratorias mientras te relajas tomando el baño. También actúa sobre el sistema nervioso, favoreciendo una mayor relax.

    El aceite esencial de pino también es perfecto para darte masajes en las piernas. En el caso de dolores musculares leves, distensiones o pequeños hematomas, se puede masajear la parte del cuerpo afectada con movimientos circulares con una mezcla a base de aceite de sésamo al que se le añaden los aceites esenciales de pino y tomillo (cinco gotas cada uno). Para reactivar la circulación sanguínea se realiza un masaje a partir de las extremidades inferiores (de abajo hacia arriba), se empieza desde las plantas de los pies y luego se va subiendo hacia los tobillos, pantorrillas y muslos.

    Como todas las coníferas, el pino se usa para tratar el tracto respiratorio. En caso de resfriados y toses se puede recurrir a inhalaciones. Pon unas gotas de aceite esencial de pino en un recipiente con agua caliente: agrega unas gotas de esencia de ciprés y menta te ayudará a inhalar y exhalar más profundamente. En el difusor o en el humidificador del radiador su aroma se expande por las habitaciones, dando un aroma muy agradable a bosque, a naturaleza. Es agradable ya que crea una atmósfera de frescura. Además, según las antiguas tradiciones, su aroma transmite influencias positivas a la psique, infundiendo paciencia y equilibrio.

    El aceite esencial de pino lo puedes conseguir en tu herbolario de confianza y también es componente de algunas cremas y lociones que se pueden aplicar en el pecho para favorecer el sistema respiratorio.

    Aunque es un producto que suele ser muy seguro y sencillo de aplicar, te recomendamos que lo pruebes antes en la piel para ver cómo le sienta y si se produce alguna reacción.

    Recuerda que nunca lo debes ingerir por vía oral. Tampoco debes usar una cantidad muy concentrada o sin diluir ya que en su estado puro podría irritar la piel, los ojos y vías respiratorias.

    Para su aplicación se recomienda diluirlo en un aceite base (como de coco, almendras, oliva etc), para que no produzca irritación. De esta forma, como hemos comentado antes, también lo puedes agregar en el agua de la bañera para darte baños relajantes.