“La seguridad de empleados y clientes ha sido fundamental para poder alcanzar el objetivo de garantizar el acceso de los consumidores a la alimentación durante los meses tan duros que hemos pasado. Desde el primer momento, los supermercados han puesto en marcha los protocolos, o los han reforzado, y la inversión necesaria para que así fuera. En estos momentos, en que comienza la reactivación de la vida social y económica, es importante no bajar la guardia y seguir atendiendo las consignas de seguridad vigentes”, dijo María Martínez-Herrera, responsable de Seguridad en ASEDAS.