Los secretos de la agricultura ecológica de manos del mayor productor de manzana orgánica de Europa, Bio Val Venosta - Reportajes en HosteleriaenValencia.com
Los secretos de la agricultura ecológica de manos del mayor productor de manzana orgánica de Europa, Bio Val Venosta
Levadura, Setos, Tréboles, Feromonas, Lombrices… los aliados más inesperados del Cultivo Biológico
Las sinergias entre los distintos elementos del ecosistema son la base de la filosofía de la agricultura ecológica, que lleva a los árboles y la tierra a dar lo mejor de sí mismos. Una manera de trabajar que requiere de la alianza de tres elementos fundamentales: el clima, el ecosistema y el suelo.
En el Valle Venosta, situado en los Alpes Italianos, conocen muy bien estas técnicas porque su Asociación de Productores Hortofrutícolas, VIP-Val Venosta, es uno de los mayores productores de manzanas orgánicas de Europa. Cada año cosechan más de 20.000 toneladas en un área equivalente a 870 campos de fútbol. Y sus frutas llegan a países como Alemania, Francia, Italia, Escandinavia, Inglaterra y, por supuesto, España.
El 20% de la superficie que trabaja la asociación está dedicada al cultivo orgánico de la mano de más de 200 agricultores certificados por los organismos más exigentes, como Bioland o Demeter.
Actualmente, más del 10% de la producción de Val Venosta es bio y se espera que en cinco años aumente este porcentaje en 5 puntos, lo que supondría un crecimiento del 50% dentro de una tendencia al alza que se mantiene desde hace años.
También se han ido ampliando en los últimos tiempos el número de variedades cultivadas en la línea orgánica. En su catálogo combinan algunas clásicas, como Golden Delicious, Red Delicious, Fuji o Gala, junto a otras más específicas, por ejemplo Morgenduft, Topaz o Pinova. Además, han incorporado novedades varietales como Natyra, Kanzi, Envy, Bonita o Ambrosía.
Una muestra de la clara apuesta por BIO Val Venosta dentro de la asociación y de los avances obtenidos por unos bio agricultores que sienten auténtica pasión por el desafío que supone utilizar únicamente productos y técnicas naturales para cuidar de los árboles y sus frutos. Un reto para el que encuentran grandes ayudas en las cosas más sencillas.
CONSEGUIR LO MEJOR DE LA TIERRA Y LOS ÁRBOLES MEDIANTE TÉCNICAS INTELIGENTES, POCO AGRESIVAS… Y CURIOSAS
Aunque parezca extraño, los campos dedicados al cultivo de manzanas ecológicas en Val Venosta tienen mucha vegetación, no sólo manzanos. Es fácil encontrar tréboles, que viven en simbiosis con unas bacterias llamadas rizobios que filtran el nitrógeno, haciendo que este elemento - necesario para crear masa vegetal - se fije en el terreno y llegue a las raíces de los árboles, manteniendo las plantaciones fuertes.
Los bio agricultores también plantan arbustos y flores para atraer a las mariquitas, depredadoras de pulgón, y a las abejas, que facilitan la polinización. E incorporan refugios para insectos, montones de piedra y de madera, generando un hábitat atractivo para que se instalen pequeños animales, reptiles, arácnidos y pájaros, encantados de contribuir a limpiar el campo y luchar contra las plagas, al tiempo que se alimentan.
Dos ejemplos de otras técnicas curiosas que emplean los agricultores ecológicos de Bio Val Venosta. La primera consiste en que sus manzanas conocen la levadura en polvo antes de formar parte de ricos pasteles y postres. Aprovechando las propiedades del bicarbonato de sodio, lo aplican sobre el tronco para eliminar excesos de humedad y prevenir de manera no agresiva hongos que puedan afectar al árbol.
La segunda es que diseminan de feromonas en los campos para frenar la propagación de algunas plagas. Esta sustancia sirve a los insectos machos para identificar a las hembras, pero con la propagación masiva se confunden y no pueden encontrar a sus parejas para reproducirse.
GRAN VARIACIÓN TÉRMICA ENTRE EL DÍA Y LA NOCHE, VIENTO CONSTANTE Y POCA LLUVIA HACEN DE VAL VENOSTA UN PARAÍSO PARA EL CULTIVO DE MANZANAS
Siguiendo este tipo de estrategias que cuida las parcelas de manera sencilla y natural, apoyándose en la biodiversidad y únicamente en fertilizantes biológicos, los agricultores de BIO Val Venosta producen unas manzanas de alta montaña y calidad.
Su tamaño es más pequeño, pero tienen una pulpa jugosa y firme, además de un extraordinario sabor, ya que las cosechas reciben todos los beneficios de un microclima especialmente indicado para el cultivo de manzanas.
En este extraordinario enclave en plenos Alpes Italianos se producen muy pocas precipitaciones a lo largo del año y corre constantemente viento fresco, venido de los macizos montañosos que circundan el valle. Estas condiciones climáticas secas no invitan a acercarse a las plagas. Mientras que el agua de los glaciares mantiene hidratados los terrenos en su justa medida y los 300 días de sol al año favorecen la coloración de las manzanas. Además, la intensa variación de temperaturas entre el día y la noche les da una característica consistencia crocante.
En este ambiente idílico se produce este eco-cultivo, libre de residuos de productos fitosanitarios, que cuenta con todas las certificaciones de la UE. Cada paso de la producción está controlado por organismos de inspección acreditados y queda documentado mediante un sistema de trazabilidad.
Además, han puesto en marcha una completa herramienta de transparencia para alimentar la confianza de los consumidores. En las etiquetas que acompañan a las piezas o al packaging del producto, está indicado el nombre del responsable del cultivo en concreto de las manzanas que el comprador acaba de adquirir. Si lo introduce en la web biography.vip.coop, puede ver vídeos y artículos que cuentan su historia, muestran sus campos… además de tener a su disposición toda la información sobre los métodos y garantías del cultivo orgánico de la asociación. Una iniciativa que permite a los consumidores conocer a los bio agricultores venostanos y transmitir el convencimiento de que se puede producir alimentos de manera más saludable para las personas, los animales y las plantas.
La Asociación de Cooperativas Hortofrutícolas de Val Venosta, VI.P, nace en 1990 y está formada por siete cooperativas y 1.700 productores que cultivan acerca de 5.200 hectáreas en el Valle Venosta, ubicado en los Alpes Italianos.
El microclima especial del valle (300 días de sol al año; fuerte fluctuación de temperaturas entre el día y la noche; y la altitud a la que se cultivan las manzanas –entre los 500 y los 1.000 metros-) y su naturaleza ofrecen las condiciones perfectas para el cultivo de manzanas de alta calidad.
El 90% de la producción de VI.P se obtiene aplicando técnicas de cultivo integrado, que reducen al mínimo el uso de pesticidas químicos y prohíben los tratamientos químicos tras la cosecha. Una forma de cultivar respetuosa con el medio ambiente, la naturalidad de los frutos y la salud humana. El 10% restante de su producción es biológica. Esta línea, BIO Val Venosta, tiene una cosecha media que supera las 30.000 Tn y tiene como principales mercados Italia, Alemania y Países Escandinavos.
Mientras que Manzanas Val Venosta recolecta una media de 325.000 toneladas cada temporada y las comercializa en 50 mercados internacionales entre los que destacan Italia (absorbe el 50% de la producción), Alemania, Península Ibérica, Escandinavia, Países del Este, Norte de África y Oriente Medio.