1. Calentamos en el microondas la leche y añadimos el azúcar y la levadura. Reposamos la mezcla durante 10 minutos
2. Añadimos la sal a la harina para después, incorporar la harina a la leche y mezclar con la ayuda de unas varillas o batidora.
3. Calentamos la mantequilla para que se ablande ligeramente. A continuación, lo añadimos a la mezcla y amasamos hasta obtener una masa homogénea. Cuando estén todos los ingredientes mezclados, hacemos una bola con la masa y tapamos ligeramente con un paño. Dejamos reposar la masa hasta que aumente de tamaño, una hora aproximadamente.
4. Cuando la masa haya doblado su tamaño, la dividimos en pociones y hacemos bolitas con ellas. Las aplastamos y con la ayuda de un cuchillo le damos forma rectangular cortando los bordes. A continuación, le hacemos tres cortes diagonales en la parte de arriba de los panes
5. Dejamos reposar los panes colocados en la bandeja del horno, tapados con el paño, aproximadamente durante 25 minutos.
6. Precalentamos el horno a 180ºC aproximadamente. Mientras tanto, batimos un huevo y cuando haya pasado esa media hora, los pintamos con la ayuda de un pincel.
7. Metemos al horno y cocemos los panes durante 10 minutos.