El futuro es hoy. Hace mucho que nuestros móviles y tablets se han convertido en una parte indispensable en nuestro día a día, una extensión más de nuestro cuerpo. El incremento de memoria interna es exponencial y esto permite que el usuario pueda descargarse cada vez más aplicaciones en su terminal móvil. Por otro lado, la sencillez y la facilidad de acceso que nos ofrece el aumento del ancho de banda (4G y 5G) permiten una experiencia más satisfactoria en la utilización de estas aplicaciones.
La utilización del terminal móvil para casi cualquier cosa ha creado un nuevo panorama social, el fin del dinero en efectivo. Las entidades bancarias y los países ya se están preparando para esta situación. Si nos hacemos eco de los datos, más 1,2 millones de comercios en Europa aceptan el pago con tarjeta de crédito o débito y en Dinamarca, por ejemplo, 1 de cada 3 ciudadanos realiza transacciones a través del móvil. El pago a través del móvil se ha convertido en tendencia y tiene unas posibilidades de crecimiento exponencial sin límite. También hay datos que indican que la tarjeta de crédito irá desapareciendo de forma paulatina, al quedar integrada en nuestro dispositivo móvil.